viernes, 11 de diciembre de 2009

ELLA DICE

En tardes como ésta,indecisa,oscilando entre las sombras y la luz.
Celebrando la posibilidad de un prodigio,de algo que no se atenga a la costumbre,a lo previsible.
Así escribo lo que espero,lo que no tiene cabida en esta espesura,una realidad atropellada,adherida sin remedio a la fragilidad.
¿A quién hablarle de estos huecos,de este mapa indescifrable de un país que no parece existir,de ciudades invisibles y un lenguaje olvidado?.¿Cómo notarse,vivirse en cada uno de los latidos,ruído de fondo que asusta y conmueve?.
Ella dice.Dice tantas cosas;atesora palabras y las dispone en espacios acolchados para que permanezcan y habiten los olvidos,esos no lugares que ha ido acumulando y no sabe nombrar.
Hace proyectos que nunca lleva a cabo y sus excusas son las mejores porque para un fuguista no hay límite,cualquier resquicio,todo punto infinitesimal es propicio para desvanecerse.
Hace tiempo,apenas nada más.Hace tiempo por si acaso,por si no hay designios ni maldiciones ancestrales.
Y se distrae,negociando con la nada los posibles futuros que no serán.
Contiene la respiración y regresa al inventario de nubes,a las primeras veces para todos los cometidos.
Camina tan despacio que parece cansada a todas horas,como si hubiese vivido mil vidas y la muerte la hubiera esquivado dándole múltiples opotunidades.
Recuerda días felices porque detesta esa lágrima fácil que asoma,detesta la compasión de los cualquiera.Sabe que la risa la habitó y aún es pronto para claudicar.
Se rompe en mil fragmentos y el amanecer la sorprende en plena reconstrucción.Materiales de derribo que une con la delicadeza del que sabe que no cuenta con nada más.
Como esa ley de la Física:Ella no se crea ni se destruye.Sencillamente,se transforma.
Tanteando las aproximaciones,los acercamientos.
Como manos que empujan en la oscuridad.

Aún no he visto la entrevista completa a Angélica Lidell que le han hecho en LA MANDRÁGORA,fascinante esta mujer y sus montajes teatrales,descarnados y abruptamente sinceros.Me conmueve su hermosa desnudez,esa exposición sin cortapisas del YO.

3 comentarios:

  1. Como nadie comenta nada,yo me comento.¿Qué ha pasado con mi seguidor/a 8,que no ha durado ni dos días en este blog?.¿Qué ha ocurrido,VioletaNIEBLA?.En fín,qué se le va a hacer.

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  2. Hola Elena,
    Acabo de alucinar con este texto. Tantas reminiscencias, tantos momentos propios. Ni siquiera puedo repetir aquí cada uno de los momentos climáticos de este texto, porque tendría que repetirlo entero.
    Elena, hermoso. Duro, triste, hermoso.
    Un abrazo.

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  3. Mi querida Leola,qué buena sensación provoca llegarle al menos a una persona;cuando leo tus entradas te reconozco en muchos rincones,en puntos difusos que nos acercan,me reconozco en ellos.No me extraña que un adolescente como Eric,sensible,se haya convertido en seguidor tuyo.Le hablas,le incluyes en tu universo emocional.
    Muy agradecida por tu comentario profundo y aupador,me ha elevado un momento del suelo,de la fea realidad.
    Un abrazo grande,grande.

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