Queda una confirmación de soledad en esa búsqueda;no es fácil perseguir algo más que la sucesión de relatividades que nos acorralan pero yo no puedo ni quiero conformarme;no me sirve la compañía de zombies,los tengo alrededor y no lo saben pero el frío que dejan al pasar los delata.
Ayer NOSTROMO contaba con la inestimable charla de Rafael Argullol y percibía la vida,notaba su calor y su aroma,la firme voluntad de ser a pesar de todo.
Sobrevivo a la derrota comunicativa cada día,voy acumulando descubrimientos y soy casa habitada que admite el gran silencio y la risa infecciosa;nada me es ajeno y perseverancia es un buen propósito al final de este año.
Perseverar en la cuestión humana.
¿En qué si no?.